Carta:
Reconocimiento
Estimado Doctor Marietan,
ME llamo P, soy Licenciada en Psicología.
Hace un tiempo llego a mi consultorio una paciente cuyo
esposo era sin dudas, un psicópata. Yo no tenía
experiencia y desesperada empece a buscar información
para ver como manejaba el tema. Sabía que el caso exedía
mi capacidad pero ésta paciente había establecido una
buena transferencia y acordamos darnos ambas un tiempo (no
muy largo por supuesto) y ver que pasaba. Rápidamente
empece a buscar información y así dí con Ud.
Devoré todo lo que encontre de su autoría, lo puse en
práctica y mucho se pudo hacer con esta historia. Mi
paciente maneja el contacto cero, ha vuelto a vivir, con
todas las dificultades de las personas que pasan por estos
trances. Se puede decir que vamos bien.
Pero cuando pasó la tormenta (y aclaro que se pudo hacer
mucho porque mi paciente estaba «a punto caramelo» para
dejar esa relación), lo que empezó a ocupar mi mente fue
lo siguiente: «Cómo hago para no odiar a estos personajes.
De dónde me agarro para encontrarles un sentido en el
sinsentido de todos sus actos».
Termino hoy de leer su ultimo libro «Curso de psicopatía:
Los extravagantes» y vuelvo a encontrar en sus palabras
respuestas a mis devaneos.
Ud. sin saberlo, se convirtió en mi supervisor pero
tambien en una guía para seguir creyendo en la gente.
Somos como decía Freud, un eslabón de una cadena y
funcionamos para nosotros mismos pero también para la
especie. Me pareció genial la última parte del libro y
como ubica a éstos personajes, encontrándoles algo
meritorio y una funcion social que los determina.
Le he derivado algunos pacientes. Muchos no llegaron a su
consulta pero tengo entendido que algunos sí lo han hecho.
El último es nada menos que mi ex marido, quien despues de
charlar con Ud. me llamó para decirme que estaba muy
contento con el encuentro.
Por eso y para agradecerle su invaluable ayuda es que le
escribo éste mail.
Un afectuoso saludo,
P